Tabla de Contenidos
“El buen juez por su casa empieza”, cita el adagio popular que ilustra, de la mejor manera, el rumbo hacia el que se encamina la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en los países de Centroamérica, donde las organizaciones se han dado cuenta de que una de sus prioridades debe ser la dimensión interna, con su activo más importante: sus colaboradores.
Ahora las acciones dirigidas hacia los empleados están definidas por un amplio análisis para conocer a los involucrados, los impactos y la definición de programas centrados en estas inquietudes. “El compromiso con la calidad de vida de los colaboradores y sus familias es el gran enfoque de la RSE”, asegura Teresa de Alfaro, directora ejecutiva de SumaRSE, la organización que impulsa el desarrollo sostenible en Panamá.
José Roberto Leiva, coordinador pro témpore de IntegraRSE, una alianza conformada por las asociaciones de sostenibilidad de siete países de Centroamérica y el Caribe, dice que trabajar “de adentro hacia afuera” es consecuencia de la evolución de la RSE hacia un modelo de triple utilidad (triple bottom line), donde, tan importantes son las utilidades económicas, como las sociales y las ambientales.
Capacitación, reforestación, asesorías financieras y hasta financiamiento para una mejor vivienda son algunos ejemplos de las iniciativas que se han establecido para la RSE en los países de la región.
Fuente: Forbes México y ExpokNews